La Ley Orgánica 8/2021, de 4 de junio, de Protección Integral a la Infancia y la Adolescencia frente a la Violencia, ya conocida como LOPIVI, ha supuesto el corolario de uno de los compromisos de la Agenda 2030, en su intento de «poner fin al maltrato, la explotación, la trata y todas las formas de violencia y tortura contra los niños», entre cuyos objetivos está el de «promover sociedades justas, pacíficas e inclusivas». La intención del legislador, cuyo principal objetivo es «violencia cero sobre la infancia y la adolescencia», muestra una enorme sensibilidad por la infancia y la adolescencia, queriendo dar respuesta a cualquier forma de violencia ejercida sobre el menor de edad. Algo sin duda esperanzador, pues nadie, y menos aun los más indefensos, pueden ser objeto de agresión por mínima que sea.
Esta obra no pretende en absoluto hacer una crítica a la ley, ni son unos comentarios a la misma, sino analizar desde la perspectiva jurídica, criminológica y publicitaria las modificaciones que introduce en sus Disposiciones Finales y que afectan a otros cuerpos normativos, como es el civil, el penal, el procesal o el publicitario, enriquecido por la experiencia profesional de los autores. Y ello lejos de un planteamiento ideológico o político, que dista mucho de lo que es fundamental: la protección del menor de edad frente a la violencia.
Tirant lo Blanch
RESEÑA DE ATELIER
La recientemente aprobada Ley Orgánica 8/2021, conocida como LOPIVI, busca proteger a los niños y adolescentes contra todas las formas de violencia, incluyendo el maltrato, la explotación y la trata. Esta ley es parte de los compromisos de la Agenda 2030 para promover sociedades justas, pacíficas e inclusivas. El objetivo principal de la legislación es alcanzar “violencia cero” en el ámbito de la infancia y la adolescencia. Esta iniciativa demuestra una gran sensibilidad hacia los derechos de los niños y busca dar respuesta a cualquier forma de violencia ejercida sobre ellos. Aunque la ley no es objeto de crítica, se analizarán sus modificaciones en otros cuerpos normativos como el civil, penal y procesal, desde una perspectiva jurídica, criminológica y publicitaria. Este análisis se realizará sin un enfoque ideológico o político, ya que lo fundamental es la protección de los menores de edad frente a la violencia.